A través de este breve texto tratare de plasmar el inicio de esta actividad tan importante y llena de satisfacciones.
Pertenezco a una familia de 11 hermanos, de los cuales solo dos pudimos estudiar, una hermana que es doctora y su servidor.
Inicie mis estudios en Michoacán, estado de origen, sin embargo por cuestiones familiares nos desplazamos a Baja California, Ensenada, desde 1967 motivo por el cual me siento Bajacaliforniano.
Termine la primaria, secundaria y preparatoria, en este ultimo nivel, ya empezaba a inquietarme la docencia, me inicie como apoyo de mi profesor de matemáticas y química, asignaturas que siempre me satisficieron, además de las otras. Posteriormente conseguí una beca para seguir estudiando la Universidad, me desplacé a Cuernavaca, Morelos donde inicie mis estudios de medicina, y como una forma de reducir los costos a la familia continúe dando asesorías a jóvenes de secundaria y preparatoria, permanecí durante dos años, tuve que regresar a Ensenada por cuestiones económicas.
Continúe estudiando la Universidad pero en una carrera distinta, Ingrese a la Escuela Superior de Ciencias Biológicas del UABC, y seguí impartiendo asesorías a grupos pequeños de preparatoria, en este proceso conocí mas sobre la docencia y el gusto se incremento, además, fui muy afortunado de conocer a mi compañera con la cual he compartido hasta el momento 27 años de mi vida.
Durante mis estudios Universitarios, ingrese como Becario impartiendo clase a jóvenes de la carrera cuando el maestro titular no se presentaba, al terminar la carrera trate de ingresa como maestro, pero, por cuestiones de espacio no fue posible.
Sin embargo, esto no mino mis ilusiones de ser profesor, empecé a llevar mi currículo a secundarias y preparatorias, después de tanto buscar, logre ingresar a una preparatoria federal, aquí vertí, todas mis energías en prepararme y dar lo mejor de mí, en esta etapa laboraba en tres escuela, en una privada y dos estatales, esto me llevo a entender muchas cosas que como estudiante no me imaginaba, aún así, me di cuenta que requería saber más al respecto, posteriormente ingres al CBBC desde 1998 hasta la fecha, desde que inicie la institución me ha impartido una gran diversidad de cursos para el desarrollo como docente, sin embargo, sentí que me hacía falta algo mas y decidí estudiar una maestría en Docencia la cual me dio otra perspectiva de mi actividad como docente, lo cual me adentro en el ámbito cualitativo de la docencia, sin embargo, mi formación me exigía conocer el aspecto cuantitativo de la educación, lo cual me llevo a realizar otra maestría en investigación educativa, misma que me permitió tener ambas visiones, esto ha logrado desarrollar otros aspectos y buscar la forma de utilizarlos en el desarrollo de mis actividades, lo cual me llena de satisfacción y orgullo.
Sin embargo, se que aún es posible desarrollar otras facetas y actualmente estoy implicado en algunos proyectos de investigación educativa y estoy realizando el Doctorado en Educación, esto no significa que el amor a mi profesión de docente se vea empañada, al contrario me lleva a buscar diferentes formas y estrategias que beneficien a nuestros alumnos, se que es mejor estar dentro de los cambios que se han dado y sobre aquellos que tengan que ver con nuestra profesión.
Durante este tiempo que llevo implicado en esta actividad he tenido mas satisfacciones que tropiezos, sin embargo, día con día es necesario que cada uno de nosotros reflexionemos sobre nuestra actividad docente y en su momento saber, cuando deberá uno dejar las aulas.
A todos mis compañeros les invito a seguir adelante y no desistir durante esos pequeños tropiezos, les invito a compartir nuestras experiencias a estar abiertos a comentarios que se, nos permitirán mejorar y a desarrollarnos mejor como personas.
Gracias por sus comentarios y al permitirme ser parte de este gran cambio.
Saludos
¿Existe una fórmula para ser maestro?
Durante mucho tiempo, antes de implicarme en esta profesión tan especial, me imaginaba que un profesor nacía con ese don, sobre todo cuando veía y escuchaba a mis maestros de antaño, sentía curiosidad y en mas de una ocasión les pregunte si el ser maestro requería ser inteligente, claro que en ese tiempo, su respuesta fue contundente, poco después trate de entender a otros maestros, aquellos que nunca tenían tiempo para sus alumno, que no había un instante en que no les molestara alguna pregunta inocente o simplemente el tratar de entender algún detalle.
En la actualidad, ese patrón que vi, cuando niño, se repite, aún existen maestros comprometidos con su actividad, paro también los hay, aquellos que no tienen otra forma de sobrevivir y para ellos es solo un trabajo, el ser maestro implica entender todo un proceso multifacético, como lo es, nuestro alumno.
En la actualidad, es poco difícil tener un estereotipo de alumno y un poco mas difícil el de un maestro, sin embargo, me doy cuenta que no estamos solos en este camino, que siempre habrá alguien que lleve el mismo destino, ser maestro para toda la vida.Luis Álvarez
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario